El caluroso verano de 2023 nos ha hecho reflexionar sobre su impacto en el Mediterráneo español y en sus actividades económicas clave, en el medio ambiente y en nuestra salud, subrayando la urgente necesidad de tomar medidas para adaptarnos a las condiciones climáticas cambiantes.
La influencia humana en el clima terrestre ha sido una constante desde la Revolución Industrial. La creciente emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera ha provocado un aumento en la temperatura global y alteraciones en otros parámetros meteorológicos, como la precipitación. Este calentamiento se ha sentido de manera especialmente marcada en la región Mediterránea, donde se registra una señal cálida acentuada. Además, esta zona se ve con frecuencia impactada por eventos meteorológicos extremos, como lluvias intensas y olas de calor. De manera preocupante, diversos estudios científicos han señalado que estos eventos extremos se volverán más intensos y/o frecuentes en las próximas décadas.
Como hemos podido comprobar, este verano de 2023 nos ha dado un buen “achuchón” de calor. Según los expertos de AEMET, ha quedado en tercer lugar en la lista de los veranos más cálidos desde que hay registros. Solo ha sido superado por los veranos de 2022 y el legendario 2003. Durante el presente verano, hemos sufrido cuatro olas de calor que nos han sometido a 24 días de sofoco. En promedio, la temperatura estival ha sido 1.3ºC más alta de lo habitual. Las máximas diarias nos han hecho sudar, situándose en promedio 1.2ºC por encima de lo normal. Las mínimas, que normalmente nos alivian durante las noches calurosas, se han mantenido 1.4ºC por encima de la media (Fuente: Agencia Estatal de Meteorología).
Este verano tan cálido nos ha hecho pensar en cómo el cambio climático afecta a actividades económicas clave, el medio ambiente o nuestra salud, así como en la necesidad de tomar medidas para adaptarnos a las condiciones climáticas. El cambio climático puede afectar negativamente a un gran abanico de actividades socioeconómicas, siendo esto particularmente importante en los sectores expuestos al clima. Un claro ejemplo de ello son las costas del Mediterráneo español, densamente pobladas y donde la economía azul -definida como aquellas actividades asociadas a mares, océanos y costas- representa una fuente esencial de riqueza y prosperidad para la zona, ya que proporciona oportunidades de crecimiento, empleo e inversión. Por tanto, el desarrollo de una visión estratégica para el desarrollo sostenible, así como la garantía de políticas y acciones encaminadas a impulsar la economía azul en la región, son de vital importancia en el contexto actual de cambio climático. En concreto, la acuicultura, la pesca y el turismo costero son sectores relevantes de la economía azul por su contribución al desarrollo social y económico de la costa mediterránea española.
De esta situación nace el proyecto ECOAZUL-MED, que tiene como objetivo generar, por primera vez, una herramienta web de uso público que proporcione información climática que permita anticipar los efectos del cambio climático en acuicultura, pesca y turismo costero asumiendo distintos escenarios de emisiones para los próximos 40 años en el litoral mediterráneo español. La herramienta, que estará disponible en 2024, se está desarrollando combinando metodologías cuantitativas -análisis de datos climáticos- y participativas -incluyendo a agentes vinculados a estos sectores en las diferentes fases del proyecto para asegurar que la herramienta responda a sus necesidades. Ésta ofrecerá a empresas, administraciones públicas y otros agentes, información climática relevante que permita la planificación de estas actividades económicas. Además, pondrá de relieve la necesidad adaptación de estos sectores al cambio climático para asegurar su desarrollo sostenible, que se puede ver comprometido por las condiciones climáticas futuras, tal y como agentes vinculados a los sectores, han puesto de manifiesto en el proyecto. En este contexto, los efectos negativos pueden contrarrestarse implantando medidas de adaptación, efectivas, basadas en decisiones informadas, destinadas a minimizar los impactos negativos y, por lo tanto, garantizar un futuro mejor.